LI Congreso de Filosofía Joven
Madrid, 30 de junio - 3 de julio de 2014

Sede


El Congreso de Filosofía Joven viene celebrándose ininterrumpidamente desde 1963. Desde entonces hasta hoy se ha convertido en un señalado punto de encuentro para jóvenes investigadores que comparten una misma inquietud por la filosofía. Proporcionar un espacio abierto y directo en el que poder desarrollar esta actividad en libertad es la motivación fundamental que desde el comienzo viene inspirando el que en la actualidad es el Congreso más antiguo de España.
      Se trata, en efecto, de una iniciativa que no quiere cerrar sus puertas al resto de disciplinas no específicamente filosóficas. Y ello bajo el convencimiento de que la filosofía emerge precisamente en el punto de encuentro de modos de pensamiento diversos anejos a la filosofía. Sin embargo, la afluencia de participantes no pertenecientes al ámbito de la filosofía no ha dejado de ser uno de los temas más polémicos de este evento. La disconformidad de los participantes ante lo que parecería ser una progresiva devaluación de la filosofía es algo que de alguna manera se viene constatando en las ediciones más recientes del mismo. La presente convocatoria tiene el objetivo de dignificar el oficio de la filosofía, demostrando la capacidad de hacer “filosofía joven” de calidad en un espacio de encuentro plural.
   La constatación de la progresiva devaluación de la filosofía conduce necesariamente a una controversia referente al carácter institucional de la filosofía. ¿Proporciona la Universidad un lugar adecuado en el que puede desarrollarse el pensamiento en libertad?
      La experiencia del último congreso dejó patente la posibilidad de hacer filosofía fuera de las aulas, al margen de horarios y protocolos, en suma, lejos del seno institucional que proporciona la Universidad. El objetivo de esta convocatoria es, sin embargo, demostrar la capacidad de la Institución para acoger un pensamiento filosófico libre y plural. Ello no supone ignorar el hecho reconocido por buena parte de la sociedad de que las instituciones tienen mucho que mejorar. No se trata, pues, de ignorar este hecho fundamental, sino de la convicción de que la institución sólo puede ser corregida y mejorada desde dentro: la institución ni suma ni resta nada a la filosofía, ahí donde lo que hay es la iniciativa de hacer filosofía.
      En una convicción como ésta se apoya la propuesta de la organización de llevar nuevamente el Congreso de Filosofía Joven a la Universidad, y a un espacio de larga tradición filosófica, como lo es la Universidad Complutense de Madrid.